miércoles, 1 de agosto de 2007

Ese amor es de locos


Le escuché en silencio porque escupir aquella historia parecía costarle demasiado esfuerzo. La miraba y notaba vergüenza en su mirada, así que le dije si quería apagar la luz. Y así lo hizo; me empezó a contar su historia a oscuras:
Con dieciséis años recordaba cómo de pequeña compartía buenos recuerdos con una de sus mejores amigas; Andrea. Hacían juntas patinaje y en el colegio se pasaban horas y horas hablando, hasta que de repente, sin saber por qué, se separaron. Pasaron los años y nuevamente el destino las volvió a unir. La historia parecía que se repetía, ya que se volvieron a reunir patinando y en el instituto en las horas de patio. Su amistad al principio era fría, pero poco a poco empezó a consolidarse hasta coger una confianza tremenda. Cambiaron de instituto y fueron a parar al mismo sitio. Las dos juntas otra vez en el mismo lugar y momento. Parecía mentira que el destino pudiera tener esa fuerza, una fuerza imparable. La madre de Andrea y su padre comenzaron a salir, así que Andrea y ella a parte de ser amigas, eran como hermanas. De ese modo su relación todavía se fortaleció más; dormían siempre juntas, compartían muchas cenas y comidas. La confianza entre ellas pasó a ser desmesurada. Sin darse cuenta y sin tener ninguna intención acabó enamorándose de Andrea. Su amor pasó a ser obsesión y no sabía qué hacer. Pensaba en las mil posibilidades que tenía y ninguna le convencía; imaginaba en decírselo, pero no. Imaginaba en lanzarse, pero no. La opción que creyó más correcta fue callar su secreto.
Pasaron dos años y fue mayor de edad, pero todo seguía igual. No sabía cómo sacarse a Andrea de la cabeza ni tampoco cómo actuar con ella. Ese amor, esa obsesión, se le había convertido en dolor. Un dolor que parece clavársele cómo una espina en un corazón. Un corazón que no es capaz de olvidarla, que la ama sin cesar. Y todavía a día de hoy, la ama, la ama con todas sus fuerzas, la ama con locura. Y yo intento ayudarla escuchándola, charlando, pero aún así, ese amor es de locos.

9 comentarios:

Pedro dijo...

¡¡¡Hola!!! Bienvenida a cuentacuentos :)

El amor es lo que tiene, siempre es complicado, pero si además le sumos los prejuicios y las costumbres lo pones aún más dificil. Además a esas edades todo es terrible e importa demasiado, eso lo has reflejado muy bien.

Un saludo,

Pedro.

Jara dijo...

Y el amor duele, duele tanto que hace daño... Y se clava por dentro y no se puede comprender.

Una historia corta, sencilla y que dibuja realidad.

Un saludo y Bienvenida.

Klover dijo...

La primera de la noche ^^

A veces el amor es así de incomprensible...y hace un daño enorme...cosa que has descrito muy bien en tu cuento.

Bienvenida a este mundillo!

Luz de Luna dijo...

¡Bienvenida!, tienes mucha razón es de locos...Describes muy bién el tema de los prejuicios. ¡Tambien me ha encantando el relato de mar!. Salu2.

jennifer dijo...

el amor es el sentimiento mas contradictorio, te puede hacer feliz o hacerte sentir la persona mas trsite del mundo.Lo peor es cuando hay algo o alguien metiendo cizaña. Pero es bonito, como tu historia.

Pugliesino dijo...

Bienvenida a Cuentacuentos!!
Y qué es el amor sino locura? No es la locura aquello que escapa a la lógica? a lo normal? Describes en tu relato como no podemos controlar el amor, ni el destino, aunque a veces si que marquemos nuestro destino por callar el amor.¿Qué hacer? Sufrir un rechazo o el dolor de no expresarlo? Un tema que planteas de forma muy acertada a través de una bella historia.
Un abrazo

Mj dijo...

Bienvenida, Yaiza. Bonita historia de amor para empezar :)

atenea dijo...

Bienvenida a cuentacuentos :)

A veces amar duele, pero no se puede evitar... me ha gustado tu historia, es muy muy real eso de callarse y sufrir por amor quizá por cobardía o por miedo... ¿quién sabe?

...y me he leído la del mar también jiji me encantó!!

Un saludo!!

Sara dijo...

Bienvenida Yaiza!
Una muy buena historia con la que empiezas en Cuentacuentos, nos hablas de algo tan complejo como el amor de una forma muy sencilla, y eso no es nada fácil;)
Un beso, nos leemos